Cuando el balón rueda en una Copa del Mundo, el mundo mira embelesado. 1.100 millones de personas vieron en sus televisores la Copa del Mundo 2018. Y eso también se debió a las innumerables apuestas deportivas: Según la FIFA, durante el Mundial de ese año se apostó una media de 2.000 millones de euros por partido, un total de 136.000 millones de euros. Sólo en la final entre Francia y Croacia se hicieron apuestas por valor de 7.200 millones de euros en todo el mundo.
Ni siquiera se incluye en todas estas cifras: Todas las apuestas privadas entre aficionados al deporte. Aquí, todo el mundo puede incluso hacer el bien con sus apuestas, por ejemplo, acordando donaciones a organizaciones benéficas como apuestas.
La final anual de la liga de fútbol americano NFL es un fenómeno. La Super Bowl, que siempre se celebra el primer domingo de febrero, genera casi ocho mil millones de euros en apuestas. De esta cantidad, seis mil millones de euros proceden sólo de Estados Unidos. Es probable que esta cifra aumente en los próximos años: Sólo en los últimos años han legalizado las apuestas deportivas cada vez más estados de Estados Unidos, además de Nevada, el estado de la metrópoli del juego, Las Vegas. Por tanto, es probable que el número de apuestas siga aumentando en los próximos años. En todo el mundo, más de 110 millones de personas vieron la Super Bowl 2022 en directo.
Aunque los años gordos del boxeo de los pesos pesados en la década de los 90 hayan pasado, las estrellas de los pesos pesados como Tyson Fury, Anthony Joshua u Oleksandr Usyk siguen proporcionando buenas audiencias televisivas y apuestas. El combate espectáculo entre Floyd Mayweather y el luchador de la UFC Conor McGregor en 2017, por ejemplo, generó la mayor cantidad de apuestas de la historia lejos de la Super Bowl en Nevada. Sin embargo, actualmente el boxeo lucha por una cosa por encima de todo: la credibilidad. El futuro olímpico se tambalea tras los problemas de gobernanza en la Asociación Mundial de Boxeo (AIB) y las investigaciones sobre combates de boxeo posiblemente manipulados en los Juegos Olímpicos de Río 2016.
En Europa, la Locura de Marzo probablemente sólo sea conocida por los aficionados al baloncesto más acérrimos. En Estados Unidos, el torneo de baloncesto universitario del mes de marzo es uno de los acontecimientos deportivos anuales. El torneo de las finales universitarias, que comprende un total de 67 partidos, genera mayores apuestas en Estados Unidos que la Super Bowl o las finales de la NBA. Se dice que ha generado 8.500 millones de euros en 2022.
Las carreras de caballos son quizás el evento más tradicional de las apuestas deportivas. Y una de las carreras de caballos más renombradas es el Derby de Kentucky, que se celebra anualmente desde 1875 y es el pistoletazo de salida de la serie de torneos de las Tres Coronas. Con 273,8 millones de euros en apuestas, el Derby de Kentucky de 2022 estableció un nuevo récord del evento. En la semana completa del Derby se apostaron incluso 391,8 millones de euros.
La mayor carrera de caballos de Europa es The Grand National, que se celebra anualmente en Liverpool (Reino Unido) desde 1839. En comparación con el Derby de Kentucky, las apuestas aquí son algo más manejables: en 2021 se apostaron un total de 137,4 millones de euros.
Como liga de fútbol nacional, la Premier League inglesa es El Dorado para los proveedores de apuestas deportivas. Según las estadísticas, sólo en 2020, la Premier League atrajo más de 68.000 millones de euros en apuestas en todo el mundo. Esto significa que los aficionados al deporte apuestan más dinero en la Premier League que en la Serie A italiana y la Bundesliga alemana juntas.
No sólo en la India la Copa del Mundo de Cricket atrae a las multitudes. El Mundial de Inglaterra y Gales 2019 fue visto por 1.600 millones de personas por televisión o en streaming. Sin embargo, para el mercado de las apuestas es difícil registrar con precisión las apuestas. Y es que sólo en la India, un país apasionado por el críquet, se invierten 150.000 millones de euros al año en apuestas ilegales, según el Centro Internacional para la Seguridad en el Deporte. Un proveedor de apuestas legal e inglés calculó apuestas de unos 58 millones de euros por partido para Inglaterra, India o Australia en el Mundial de 2019.
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